sábado, 11 de junio de 2011

Hidratación desde Tahití

¡Hola bellezones! ¿Cómo estáis? Yo sigo en período de estrés y agobio, a dos días de empezar mis exámenes y no tengo apenas tiempo libre. Ese es el motivo por el que este mundo lo tenga tan abandonado, pero prometo que en cuanto acabe actualizaré más a menudo y de temas más variados, ya que por ahora me estoy centrando en posts de belleza.
Hoy os traigo un producto del que me habló mi hermana hace unos días (persona a la que desde aquí agradezco que me dé tantísimos consejos y trucos sobre cuidados, y que sé que es una de mis lectoras habituales). Se trata del aceite de Monoi de Tahití, un producto ideal para la hidratación de nuestro cuerpo y cabello.
He intentado documentarme algo más pero en información no he podido encontrar gran cosa. Lo que sí os cuento es que la mayoría de los comentarios que he leído en foros y blogs idolatran el producto.


El Monoi de Tahití es un aceite perfumado procedente de Tahití. Tahití es la isla más grande de la Polinesia Francesa, ubicada al sur del Océano Pacífico, y la belleza de sus mujeres ha sido bastante comentada. 




Se obtiene a partir de la combinación de la copra, nuez del coco, y las flores de Tiaré, dos sustancias que le transmiten un aroma exótico y unas propiedades calmantes, suavizantes y tonificantes.
Debido a sus ingredientes activohidratantes, nutritivos y suavizantes, vuelven más elástica la piel, evitando que ésta quede deshidratada y seca. Su efecto permanece entre cuatro y seis horas después de la aplicación.
También lo podemos aplicar como mascarilla sobre el pelo. El aceite envuelve las fibras capilares y evita que se rompan o se sequen, dejándolas brillantes, suaves y fáciles de peinar.
Y ahora que viene la estación estival, otro uso podría hacerse en la playa. Funciona como una protección frente a daños producidos por el sol, el mar y el viento, además de prolongar el bronceado y dejar sensación de bienestar.



Sus propiedades excepcionales fueron reconocidas oficialmente en el año 1992, por la denominación de origen Monoi de Tahití, dotándolo de garantía de autenticidad y calidad.
Y si el aceite de oliva tiene su propia ruta, éste no iba a ser menos. Se distinguen 22 paradas por la isla de Tahití, documentadas como la ruta del aceite de Monoi que ha sido creada por la asociación de fabricantes. El recorrido está respaldado por la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de la Polinesia Francesa, y tiene el objetivo de mostrar la tierra donde nacen sus ingrediente así como sus cualidades.
En esta ruta destaca la naturaleza y paisajes donde florece, las personas que artesanalmente lo elaboran y la vinculación a los rituales sagrados que ha tenido a lo largo de los siglos.







A mí me ha convencido, en cuanto me acabe mi parte de apuntes de hoy me voy a la calle a buscarlo. Y en cuanto me convierta en una periodista de verdad, me voy a la ruta.. :P 
¿Y vosotras? ¿Os gustaría probarlo?